Diferencias de la vida en la mitad del siglo XX con la actualidad de nuestra población. 10

ENTEVISTAMOS A DOÑA IRALINA SÁNCHEZ
Conocida por todos como "Doña Loza"

...¡en diciembre completará 92 años!...
                       

    

     Cuando joven vivía en "Rincón de Amarillo, metida en la cocina, cocinando", no fue a la escuela porque las escuelas quedaban "lejísimo", a "tres o cuatro leguas" de las casas que existían allí. Nos cuenta que las hijas mujeres no iban a la escuela porque tenían que ir acompañadas de los padres y los mismos no podían llevarlas porque tenían muchas cosas que hacer para poder criarlos. El único que fue a la escuela fue su hermano menor porque paraba en la casa de la abuela, en Cortume, éste, hoy, si estuviese con vida, tendría 89 años.

                                       

     "-Diversión, no había..." Su padre era vendedor ambulante, nunca estaba en casa porque tenía que viajar mucho y demoraba para ir de un lugar a otro, casi no lo veían en la casa; su madre atendía un almacén grande, que habían equipado (que era el único de la zona).  Ella, como era la mayor, cuidaba a los hermanos y cocinaba desde los 12 años.

                         

     Cuando las  amigas, hijas de los vecinos, se comprometían iban al baile que se hacía en la casa de la familia de la novia, esos son los únicos bailes que recuerda...

                              

     Conoció Rivera a los 13 años por enfermedad, sólo así la gente de aquella zona venía a la ciudad, venía porque tenía que tomar inyecciones y sólo aquí había quién la atendiera  -siempre fue muy enferma del hígado-.  

                                 

     Nos comenta que no recuerda mucha cosa porque "no tiene muy buena memoria hoy..."

                                

     Sus padres les enseñaron a leer, porque el padre de su madre era Profesor y les había enseñado, "en aquella época ser Profesor era algo así como ser Presidente hoy" por la importancia y el prestigio que tenían...

                                   

     El primer comercio que ella vio en Rivera fue cerca de donde es hoy la "Sociedad Española" por Ituzaingó, se llamaba "La fonda española", sería como un hotel hoy, en aquel momentos les decían FONDA  a los hoteles, no conocían acá la palabra "hotel", "nadie decía hotel, ni tenía la comodidad que tienen ahora..."  ella "paraba" allí cuando venía a aplicarse las inyecciones porque era lo único que había.

                                                                  

Cuando se casó, a los 18 años, vino a vivir " más cerca" de Rivera, en Curticeira, cerca de Batoví"... y venía a veces "a la ciudad". En la década del 80 se mudó para el Barrio Santa Isabel, en Rivera, que no tenía nada que ver con "Santa Isabel de hoy" pues hoy está bien poblado, antes todos los vecinos se conocían, cuando se mudaba uno todos iban a la casa a darle la  bienvenida y ponerse a las órdenes, ahora todos los que pasan en la calle son prácticamente desconocidos.